Estaba más interesada en la administración de empresas que en la Ingeniería Civil o incluso Derecho, pero finalmente optó por estudiar Ingeniería Comercial. Este es el inicio de la trayectoria académica de Brenda Rain, a quien, a diario, desde hace seis años, hemos visto trabajar en la planta abierta del sexto piso de Corfo; siempre, frente a dos o tres pantallas en las que siempre hay números, archivos de Excel y gráficos a la vista que muestran el desempeño de la gerencia de Innovación. Pero esas pantallas muy pronto se van a oscurecer.

Brenda hoy es noticia: pronto dejará de trabajar en la Corporación para viajar a Estados Unidos donde realizará un máster en la Universidad de Columbia, donde se especializará en Gestión de la Sostenibilidad.

Ahondar en sostenibilidad es abrazar una necesidad global en tiempos de cambio climático; interesarse por la trayectoria del mundo y el criterio que usan las empresas y los Estados para tomar decisiones que influyen en lo humano. Es el mismo interés que sentía cada domingo por la mañana, cuando, ansiosa, esperaba la llegada de los periódicos a su casa, para hojear con rapidez la sección de negocios y economía, fascinada siempre por la manera en que diversas figuras públicas y ministros analizaban los temas económicos. Es también el interés que la llevó a estudiar, años después, Economía.

Una de esas figuras públicas que la marcó fue el profesor de la cátedra de Macroeconomía, Óscar Landerretche, con el que experimentó un cambio significativo en su enfoque académico. Sus clases despertaron en ella un profundo interés por el Desarrollo Económico, lo que la llevó a reorientar su formación académica.

En medio de la adversidad económica que caracterizaba la época, especialmente para las personas clase media, Brenda se vio en la necesidad de trabajar para finalizar sus estudios superiores. Tuvo la suerte de encontrar un puesto en el Instituto Nacional de Estadística (INE), donde se desempeñó en el ya extinto Departamento de Estudios Económicos y Estructurales. Durante su tiempo allí, participó en importantes sondeos como las encuestas Nacional de Innovación e Industrial Anual de Manufactura (ENIA).

UNA DECISIÓN FAMILIAR

– ¿Qué tal ha sido trabajar en Corfo?
Exigente, desafiante y una muy linda experiencia. Me han permitido crecer; no sólo aprender temas técnicos, sino que también desarrollar mis habilidades blandas. De hecho, uno de los aspectos que más me agrada del trabajo es la relación cercana con mi equipo. Por ejemplo, con Fabián, quien comenzó como practicante en 2019 y ya lleva cinco años. Con él compartimos ideas y tenemos una confianza mutua que nos permite mantenernos motivados. Aprendí a estar dispuesta a escuchar y a apoyar, porque para mantener motivadas a las personas y que estas logren resultados, es necesario tener flexibilidad.

– ¿Cómo surgió la idea de hacer el magíster en Estados Unidos?
Siempre había tenido la idea de estudiar en el extranjero y ya tenía aprobados los certificados de inglés que son parte de los requisitos para postular (…) Y me decidí por la Universidad Columbia de Nueva York por el prestigió que estudiar ahí. El 29 de abril recibí una carta formal que me confirmó que había sido seleccionada.

– ¿Qué harás después de finalizar el magíster en Estados Unidos?
Sería valioso para mí trabajar en el extranjero por un tiempo, con el objetivo de ganar experiencia. Sin embargo, quiero volver a Chile. Hay mucho por hacer en mi país, el que amo profundamente. Y siempre existen oportunidades aquí, así que voy a aprovecharlas cuando regrese.